DEFENDEMOS Y APOYAMOS LA INCANSABLE LUCHA DE NUESTRA COMPAÑERA ELENA



Hemos conocido por últimas declaraciones de la profesora Elena Yparraguirre Revoredo de las cobardes agresiones y maltratos cometidos por el Estado peruano en contra de su persona por denunciar el asesinato de su esposo el Dr. Abimael Guzmán Reinoso, para impedir que realice acciones legales y para acallar su voz proletaria de condena al capitalismo y defensa del socialismo.

El mundo ha sido testigo de los 29 años de prisión con aislamiento absoluto en una cárcel militar de tortura cometido contra el Presidente Gonzalo sin que jamás haya sido llevado a un hospital para ver su salud pese a tener 86 años de edad. Y el mundo también ha visto su inquebrantable posición comunista sin jamás hincar rodillas enfrentando enhiesto, puño en alto, todos los protervos ataques de la reacción peruana y mundial.

El grandioso homenaje de la clase obrera internacional y los pueblos del mundo, reconociendo su extraordinaria brega proletaria y asumiendo seguir su ejemplo, ha enterrado las burdas maniobras de pretender que no se le haga ningún homenaje y de consentir que incinerando sus restos podría desaparecer de la mente y corazón de los pueblos del mundo. De norte a sur y de este a oeste en todos los confines del planeta, millones de comunistas y masas revolucionarias se han movilizado, pronunciado y honrado su memoria eternamente.

Ante su firmeza proletaria y el avance de la vanguardia proletaria, la reacción peruana fue maquinando su vil asesinato. Los hechos muestran el sistemático hostigamiento, agresión y tortura contra nuestro Abimael. Tanto la ONU como el Papa se han pronunciado claramente contra la cadena perpetua y el aislamiento que no son sino tortura permanente y asesinato lento. Las infamias, la desatención de salud, el aislamiento, la persecución a sus abogados todo eso y más los enfrentó el Dr. Guzmán con firmeza indoblegable.

Los dos últimos años le impidieron la visita de su esposa a la que tiene derecho, profundizaron su aislamiento deteniendo a sus abogados, apresaron en la ilegal y abusiva operación Olimpo a 80 ciudadanos por pedir libertad de los presos políticos y una nueva constitución, y a su vez el llamado terruqueo fue llegando a su máxima expresión. En julio de este año el Dr. Guzmán tuvo una crisis de salud que fue atendida en el Centro Médico de la Base Naval desde el 21 de julio hasta que se recuperó como anunció el INPE y lo comprobó la Cruz Roja, la Defensoría y su actual abogado. El día 5 de agosto los compañeros Abimael y Elena agradecen por escrito la atención médica y reiteran el pedido de visita familiar interpenales.

Sin embargo, falsamente el diario Expreso y luego Hildebrandt en sus trece difundieron la segunda quincena de agosto la noticia de que estaba internado en un hospital, agonizante y que en cualquier momento fallecería. Simultáneamente estos medios de comunicación difundieron versiones de los marinos y otros reaccionarios de que sus restos deberían ser incinerados y desaparecidos.

El sábado 11 de setiembre a las 6:40 am el Dr. Guzmán falleció repentinamente; días antes el abogado comprobó que se encontraba estable. De inmediato la compañera Elena envió una carta poder para que la compañera Yris Quiñónez recoja el cuerpo ante la negativa de entregárselo a ella, su esposa, único familiar directo. Asimismo, en uso legal de llamada telefónica, denunció al Estado peruano y a la Marina de Guerra como “los responsables del asesinato de mi esposo y de la desaparición de su cuerpo”. Ese mismo día la compañera Elena dirige a la Fiscal de la Nación una denuncia penal preventiva “por asesinato a mi esposo Abimael Guzmán Reinoso con DNI Nº 44713261 en vista que no se me permite ni ver ni entregar su cadáver”.

El día 12 la profesora Elena es reprimida con aislamiento durante un mes por haber hecho la denuncia y expresar su dolor con las palabras que el mundo proletario ha hecho suyas:

¡HONOR Y GLORIA A MI ESPOSO!

¡SEGUIREMOS SU EJEMPLO DE COMUNISTA HASTA EL FIN!

El lunes 13, en pose matonesca, el ministro de Justicia Aníbal Torres solicitó e instó a la Fiscal de la Nación Zoraida Ávalos a que “tome las medidas necesarias” para proceder a la cremación y advirtió que “cualquier homenaje […] será considerado como el delito de apología al terrorismo, castigado con hasta 15 años de cárcel”.

El miércoles 15 el fiscal denegó oficialmente la entrega de los restos mortales a sus familiares.

El jueves 16 de setiembre el Congreso aprobó su proyecto de ley para la incineración y el viernes 17 Castillo firmó la monstruosa ley de secuestro y desaparición de cadáveres momentos antes de viajar a México. Ley con nombre propio y que fue aplicada ilegalmente con retroactividad.

Todos esos agitados días la campaña internacional de reconocimiento y homenaje al Dr. Guzmán desenmascaró los negros sueños reaccionarios y aceró las voluntades revolucionarias de los pueblos del mundo.

El viernes 24 fueron cremados los restos mortales y las cenizas desaparecidas, siendo filmado el canibalesco hecho. Creían de este modo que su crimen quedaría impune y que nadie podría rendirle homenaje. Mas la denuncia legal ya está en marcha y la verdad histórica se va abriendo paso.

Estos son los hechos, no imaginerías, que muestran el proceso de hostigamiento, tortura, asesinato y desaparición de evidencias contra el Dr. Abimael Guzmán Reinoso cometidos por el Estado, sus Fuerzas Armadas y los gobiernos que los representan. La incineración de los restos por supuestas medidas de seguridad nacional es una falacia monumental. ¿Qué peligro nacional implicaba entregar los restos a su esposa para que los entierre o creme? Ninguno. Solo el odio inmenso de las clases dominantes hacia los que se rebelaron contra su explotación y el pánico que sienten frente a un pueblo que persiste en combatir y resistir la opresión capitalista es la razón real para la barbaridad que han cometido y pretenden seguir cometiendo contra la profesora Elena Yparraguirre y otros prisioneros políticos.

La campaña por la defensa de la salud, vida y libertad de los prisioneros políticos de ayer, con 30 años de prisión por levantarse en guerra popular, y de hoy, por luchar por nueva Constitución y derechos fundamentales, llevada principalmente por nuestros familiares, es una necesidad perentoria para el real avance del camino del pueblo y para la democratización de la sociedad peruana.

Muy en especial, salimos en defensa de la profesora Elena Yparraguirre contra toda la represión y hostigamiento de que es objeto buscando silenciar sus denuncias por el asesinato de su esposo y por cumplir su promesa de seguir su ejemplo de comunista hasta el fin. Saludamos y hacemos nuestra su nueva denuncia realizada en reciente audiencia judicial de Vista de causa ante la Corte Suprema de la República por el caso Tarata, donde dice: “me trasladaron en menos de 24 horas y me incomunicaron, encerrada en una pieza, sin poder sacar ningún tipo de documento ni recibir ningún tipo de visita ni de abogado […] Durante un mes he estado así aislada y recientemente ha venido la Fiscalía para recibir mi denuncia, y he pedido garantías […] se me abrió un proceso por falta grave con una sanción, con riesgo a que me regresionen al régimen cerrado nuevamente, en el cual ya he vivido. Durante 18 años de mi vida carcelaria he vivido completamente aislada”.

Condenamos el hostigamiento, tortura, aislamiento y crimen de los prisioneros políticos del Perú. Demandamos respeto a sus derechos fundamentales como a todo ciudadano peruano. Exigimos sus libertades por que levantarse contra la opresión no es delito, reclamar nueva constitución no es delito, hacer la revolución es tarea de los pueblos para acabar con la explotación y opresión capitalista.

¡Seguir denunciando el crimen del Estado peruano contra el Dr. Abimael Guzmán!


¡Defender la integridad y vida de la profesora Elena Yparraguirre!


¡Viva la lucha de los familiares de los presos políticos en defensa de su vida y libertad!


Octubre de 2021                            Comité Nacional de Prisioneros Políticos y de Guerra del Perú



Con firmeza propia de comunistas los dirigentes del PCP condenan el asesinato al Dr. Abimael Guzmán y apoyan la denuncia contra los que resulten responsables. (27 de octubre 2021)


Muy agradecidos por la solidaridad internacionalista de los abogados de Argentina y Colombia que acompañaron al Dr. Chávez en la audiencia ante el Ministerio Público, donde nuestra compañera prisionera política profesora Elena Yparraguirre Revoredo expuso la ampliación de su denuncia por asesinato de quien fuera el Dr. Abimael Guzmán Reinoso, a la vez que pide garantías para su propia vida. 
En vista de que no fue una audiencia pública y no se dispone de grabación de tan importante acontecimiento, la defensa brindó una conferencia de prensa el mismo 25 de octubre.
He aquí un brevísimo recuento de la misma ilustrado con imágenes que ya son historia. 


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