Pronunciamiento: ¡EN DEFENSA DE LA VIDA Y CONSECUENCIA REVOLUCIONARIA DEL PRESIDENTE GONZALO!



¡CONTRA LA POLÍTICA DE EXTERMINIO DEL ESTADO PERUANO Y LA MARINA EN EL PENAL MILITAR DE LA BASE NAVAL DEL CALLAO!


¡EN DEFENSA DE LA VIDA Y CONSECUENCIA REVOLUCIONARIA DEL PRESIDENTE GONZALO!


Los prisioneros políticos y de guerra del Perú, expresamos nuestra más honda preocupación por la grave crisis de salud que ha puesto en riesgo la vida del Presidente Gonzalo quien se encuentra internado en un Centro Médico de la propia Base Naval del Callao; y le extendemos nuestra solidaridad y apoyo camaraderil en todo lo que sea necesario para su pronta recuperación.

Durante estos casi 30 años venimos denunciando que el régimen de aislamiento absoluto e incomunicación se ha mantenido en perjuicio de su salud, denuncia de la cual hicieron caso omiso y se resistieron a modificarlo, nunca aceptaron introducir mejoras pese a reiteradas peticiones de su esposa, de sus abogados, de los prisioneros políticos y de guerra, o de sus familiares y sendos pronunciamientos de organismos nacionales e internacionales dirigidos a los diversos presidentes.

Antes esa negativa sistemática de solución con cierre del Penal Militar o cambio cualitativo de condiciones de prisión y sin considerar tampoco su condición de adulto mayor, nunca aplicaron cambio significativo alguno. Lo que motivó la justa denuncia penal por maltrato y tortura contra el Penal Militar, denuncia que apoyamos y respaldamos.

En el último año el nivel de vulnerabilidad por el largo encierro y aislamiento permanentes más la vulnerabilidad por su condición de adulto mayor con 86 años de edad se vieron agravados a consecuencia de las restricciones adoptadas para manejar la pandemia de la Covid-19 en el Penal Militar de la Base Naval del Callao, donde al presidente Gonzalo le suspendieron la única visita de su esposa, que recibe una vez al año, apresaron a sus abogados, con lo cual ni cartas, ni diarios, ni alimento fueron autorizados.

Es a consecuencia de ese régimen de aislamiento e incomunicación permanentes, más el agravamiento de los mismos y la deficiencia sistemática de alimentación y de atención médica correspondiente a la vulnerabilidad descrita, fue que le sobrevino la más grave crisis de salud que puso en riesgo la vida del Presidente Gonzalo.

Causa y consecuencia de los cuales responde el Estado peruano, sus presidentes, sus Consejos de Ministros y muy especialmente la Marina de Guerra del Perú quien ha venido manejando directa y mayoritariamente la imposición de esta política de exterminio del Estado peruano contra el Presidente Gonzalo. Como prueba de lo aquí sostenido tenemos las palabras de la propia Marina quien, según el semanario Hildebrandt en sus trece, habría dicho “lo que menos queremos es que se muera dentro de su celda” y exigieron sacarlo cuanto antes fuera posible del penal ¡Salvajismo puro! que recuerda los actos genocidas que con impunidad aplicaron durante la guerra contrarrevolucionaria.

Y no solamente eso sino que, una vez más utilizando a sus lacayos como siempre los reaccionarios montaron una mini campaña contra el Presidente Gonzalo al borde de la muerte, un prisionero de guerra marxista-leninista-maoísta consecuente que nunca se arrepintió ni renegó de su ideología y su propósito de hacer la revolución, demostrando su condición de gran comunista hasta el fin.

Ejemplo de gran heroicidad comunista que hoy los prisioneros políticos y de guerra resaltamos con honor.

¡CONTRA LA POLÍTICA DE EXTERMINIO DEL ESTADO PERUANO Y LA MARINA EN EL PENAL MILITAR DE LA BASE NAVAL DEL CALLAO!

¡EN DEFENSA DE LA VIDA Y CONSECUENCIA REVOLUCIONARIA DEL PRESIDENTE GONZALO!

¡CIERRE INMEDIATO DEL PENAL MILITAR DE LA BASE NAVAL DEL CALLAO!

¡APOYAMOS LA DENUNCIA PENAL DE TORTURA!



Perú, agosto del 2021

Comité Nacional de Prisioneros Políticos y de Guerra del Perú


Comentarios

  1. Nuestra plena solidaridad con el Dr. Abimael Guzmán. ¡Pronta recuperación de su salud!
    Nuestro repudio al podrido Estado peruano por tenerlo en condiciones infrahumanas durante casi tres décadas.

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