El Comité Nacional de Presos Políticos y Prisioneros de Guerra del Perú expresa su solidaridad con los familiares de las víctimas del reciente incendio en la Galería Nicolini, Cercado de Lima, Perú.
Una vez más, estas circunstancias revelan las condiciones de absoluta precariedad en que trabajan millares de personas, especialmente jóvenes obreros que son exprimidos por el sistema capitalista explotador. Ha sido desgarrador asistir a los llamados de auxilio de Hovy Herrera y comprobar que no había escapatoria posible, pues junto a otros compañeros estaba encerrado con candado en un container, en condiciones de semiesclavitud como bien dicen algunos.
Esto lo sabían los gobernantes, de todos los poderes; hubo un siniestro descomunal como el de Mesa Redonda hace años, y hace poco toda una serie de incendios (en una fábrica de plásticos, en el Callao, en la Galería La Cochera en Lima, entre otros) que tienen la misma causa: las condiciones de explotación capitalista ¡Esto es lo que quiere tapar con una infamia el congresista Mauricio Mulder! Teme que salga a la luz pública que la falta de seguridad en el trabajo, la informalidad es parte del neoliberalismo que tanto enarbolan; de ahí su malhadada, perversa “hipótesis” de que “el Movadef o Sendero Luminoso están detrás …” “lo que se está haciendo es generar zozobra”. Palabras ruines que rechazamos con indignación. Por el contrario, es el despropósito lanzado por el congresista aprista lo que busca generar zozobra. Pero, las masas tienen ojos de ver y prueba de ello es que absolutamente nadie ha avalado esa imputación infame.
Las consecuencias del incendio en Malvinas, por doloroso que sea para los deudos, seguirá el mismo curso de otros; ante cámaras se hablará de investigación y penalidades, se enaltecerá la entrega de los bomberos (que bien la merecen) y después se echará al olvido, como ha sucedido con Mesa Redonda. Con su “hipótesis”, el congresista Mulder, se muestra claramente alineado con la facción ultraderechista del Congreso que contiende con la del Ejecutivo en su afán persecutorio contra una colectividad revolucionaria por razones ideológicas, inventando “manos negras” para justificar mordazas fascistas como la modificatoria a la ley de apología, por ejemplo. Así buscan ocultar ante la opinión pública los problemas reales que atañen a todos como el decrecimiento económico directamente relacionado con la desocupación, subempleo, precariedad, en síntesis ¡pobreza! a la que arrojan a millones de peruanos, y por otro lado, ocultar las agudas contradicciones en que se desenvuelven las clases dominantes y los tienen enfrentados por los miles de millones de recursos del Estado que están en juego buscando llevarse la tajada del león. Esas son sus reales preocupaciones y no en modo alguno las condiciones de trabajo que asesinan a miles de obreros y trabajadores.
Junio 2017
Una vez más, estas circunstancias revelan las condiciones de absoluta precariedad en que trabajan millares de personas, especialmente jóvenes obreros que son exprimidos por el sistema capitalista explotador. Ha sido desgarrador asistir a los llamados de auxilio de Hovy Herrera y comprobar que no había escapatoria posible, pues junto a otros compañeros estaba encerrado con candado en un container, en condiciones de semiesclavitud como bien dicen algunos.
Esto lo sabían los gobernantes, de todos los poderes; hubo un siniestro descomunal como el de Mesa Redonda hace años, y hace poco toda una serie de incendios (en una fábrica de plásticos, en el Callao, en la Galería La Cochera en Lima, entre otros) que tienen la misma causa: las condiciones de explotación capitalista ¡Esto es lo que quiere tapar con una infamia el congresista Mauricio Mulder! Teme que salga a la luz pública que la falta de seguridad en el trabajo, la informalidad es parte del neoliberalismo que tanto enarbolan; de ahí su malhadada, perversa “hipótesis” de que “el Movadef o Sendero Luminoso están detrás …” “lo que se está haciendo es generar zozobra”. Palabras ruines que rechazamos con indignación. Por el contrario, es el despropósito lanzado por el congresista aprista lo que busca generar zozobra. Pero, las masas tienen ojos de ver y prueba de ello es que absolutamente nadie ha avalado esa imputación infame.
Las consecuencias del incendio en Malvinas, por doloroso que sea para los deudos, seguirá el mismo curso de otros; ante cámaras se hablará de investigación y penalidades, se enaltecerá la entrega de los bomberos (que bien la merecen) y después se echará al olvido, como ha sucedido con Mesa Redonda. Con su “hipótesis”, el congresista Mulder, se muestra claramente alineado con la facción ultraderechista del Congreso que contiende con la del Ejecutivo en su afán persecutorio contra una colectividad revolucionaria por razones ideológicas, inventando “manos negras” para justificar mordazas fascistas como la modificatoria a la ley de apología, por ejemplo. Así buscan ocultar ante la opinión pública los problemas reales que atañen a todos como el decrecimiento económico directamente relacionado con la desocupación, subempleo, precariedad, en síntesis ¡pobreza! a la que arrojan a millones de peruanos, y por otro lado, ocultar las agudas contradicciones en que se desenvuelven las clases dominantes y los tienen enfrentados por los miles de millones de recursos del Estado que están en juego buscando llevarse la tajada del león. Esas son sus reales preocupaciones y no en modo alguno las condiciones de trabajo que asesinan a miles de obreros y trabajadores.
¡Solidaridad con las víctimas de las Malvinas!
¡Abajo la explotación capitalista!
Junio 2017