¡VIVA EL XXIX ANIVERSARIO DEL DÍA DEL PRISIONERO DE GUERRA!

Este 4 de octubre del 2014, celebramos el XXIX ANIVERSARIO DEL DÍA DEL PRISIONERO DE GUERRA, que fue uno de los hitos en el proceso de lucha de los Presos Políticos y Prisioneros de Guerra, del Partido Comunista del Perú, en la brega por el reconocimiento de su condición de tal, ante el viejo Estado peruano, de acuerdo a lo establecido en el derecho y los convenios internacionales respectivos.

En 1985, los prisioneros políticos y de guerra de la Luminosa Trinchera de Combate de Lurigancho conquistaron esta fecha enfrentando un protervo genocidio del gobierno de turno. Recordemos lo que estableciera el PCP el año 1986.  

“…Mención especial merece la lucha de los prisioneros de guerra y de quienes directamente concurren a apoyarla. Si bien las luchas vienen librándose desde años atrás, tenaz y heroicamente, enfrentando y superando torturas, violaciones, condiciones infrahumanas, planes de aniquilamiento, represalias, asesinatos y hasta genocidio, convirtiendo las mazmorras reaccionarias en luminosas trincheras de combate, debe destacarse altamente las luchas emprendidas desde mediados del año pasado. El 13 de julio del 85, los prisioneros de guerra de las trincheras de El Frontón, Lurigancho y Callao iniciaron una lucha unitaria para conquistar la "condición de presos especiales"; y en osadas acciones beligerantes arrancaron al gobierno de Belaúnde el reconocimiento de tal condición y los derechos que la misma implica, firmándose un acta. Pero esta lucha que sorprendió y derrotó al gobierno, usando bien la coyuntura política de transferencia del mando presidencial, fue un duro golpe que respondió preparando el desquite. De éste se ocupó el nuevo gobierno, el del APRA; no bien asumió funciones comenzó a negar el acta firmada iniciándose una dura y compleja lucha en la que el gobierno intentó maniobrar aplicando la doble táctica reaccionaria; fallida ésta, maquinó y montó el genocidio del 4 de octubre, premeditadamente días antes del aniversario del Partido, buscando así incluso infligir una derrota moral a los combatientes de las trincheras y a la revolución, mas los prisioneros de guerra de Lurigancho con bravura heroica no sólo enfrentaron el genocidio sino que a costa de su propia sangre lo revirtieron sobre la propia cabeza del demagógico gobierno y con la solidaridad de clase, principalmente de los demás combatientes apresados, celebraron el 7 con exultante ardor revolucionario comunista y optimismo ejemplar(…)"
"El 4 de octubre nuevamente la sociedad peruana se remece con otro genocidio, esta vez en la propia capital de la república, en el penal de Lurigancho 30 prisioneros de guerra son asesinados y 23 heridos, ante los ojos de siete mil internos. Siguiendo plan establecido con anticipación y buscando doblegar a los prisioneros de guerra para golpear la revolución, se lanzó a los Llapan Atic, cuerpo antisubversivo de la Guardia Republicana, armados hasta los dientes contra el Pabellón Británico que ocupaban estos "inculpados por terrorismo"; ante la impotencia de doblegar la heroica resistencia, utilizando dinamita y un cargador frontal para abrir un boquete en los muros, para después lanzar dinamitazos dentro del pabellón, bombas lacrimógenas e incendiarias y luego asaltar, remataron heridos, quemaron vivos y apalearon brutalmente a los sobrevivientes para terminar incendiando el pabellón y borrar huellas de su monstruoso crimen genocida. Mas, pese a sus protervos afanes de silenciar y ocultar los hechos, la verdad se abrió paso desenmascarando más al gobierno aprista y su responsabilidad insoslayable por esta nueva y alevosa barbarie.”
“(…) Prosiguió la lucha y una vez más aprovechando correctamente la coyuntura, el 31 de octubre se obligó al reaccionario gobierno aprista a firmar el acta que negaba pero ahora firmada por autoridades de más alto nivel. Pero la lucha no cesa y la reacción siempre maquina y maniobra contra los hijos del pueblo; planteó el traslado de los prisioneros a Canto Grande para proseguir con su plan de aniquilamiento; frente a ella se organizó la campaña de "Desenmascarar y resistir" declarando su firme resolución de oponerse al traslado aún al precio de un nuevo genocidio y con intenso desenmascaramiento el desenlace de la lucha se produjo el 15 de enero del 86, cuando en enfrentamiento entre familiares de prisioneros de guerra y la Guardia Civil cae muerto un familiar y veinte heridos obligando al ministro de Justicia a declarar que "no habrá traslado a Canto Grande pues no es penal para "terroristas"; termina de esta manera un capítulo de la campaña contra el nuevo genocidio".

Y así como ayer los prisioneros defendieron con su vida la moral de la clase, hoy en las nuevas circunstancias de lucha política, en que enfrentamos una campaña reaccionaria macartista e inquisitorial de persecución política contra comunistas y revolucionarios, los presos políticos y prisioneros de guerra salimos al frente defendiendo el derecho de los comunistas a existir y el derecho de los pueblos a hacer la revolución. Rechazamos las últimas pintas llamando a la violencia pues solo sirven a una mayor persecución política, y asimismo reafirmamos nuestra indeclinable posición de luchar por una Solución Política, Amnistía General y Reconciliación Nacional.

El Comité Nacional de Prisioneros Políticos y de Guerra del Perú se reafirma en servir siempre al pueblo de todo corazón enarbolando el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento gonzalo bajo la dirección del Partido Comunista del Perú y la Jefatura del Presidente Gonzalo, y en seguir bregando porque el comunismo, nuestra meta final, brille sobre la faz de la Tierra.

    Octubre del 2014.

Comité Nacional de Prisioneros Políticos y de Guerra del Perú.


Algunas fotos de archivos








Comentarios